En una impactante operación llevada a cabo ayer, dos agentes de la Guardia Civil rescataron el cuerpo sin vida de un inmigrante en una patera que alcanzó la costa de Guainos, en Almería, en el límite con la provincia de Granada. Las imágenes del rescate muestran la cruda realidad de la migración irregular, evidenciando el peligro al que se enfrentan aquellos que buscan cruzar el mar en condiciones precarias.
En total, cinco pateras llegaron a la provincia de Almería, transportando alrededor de 250 personas, de las cuales aproximadamente un centenar fueron interceptadas por la Guardia Civil. Estos inmigrantes ya han sido trasladados a la comisaría de la Policía Nacional, donde se les ha abierto un expediente de expulsión.
En las últimas 48 horas, la provincia de Almería ha recibido a 350 inmigrantes subsaharianos procedentes de pateras que llegaron a las Islas Canarias. Estos individuos, actualmente alojados en un hotel, están siendo atendidos por el personal de la Cruz Roja, que trabaja en su reubicación entre familiares y amistades.
El aumento de la llegada de pateras a la costa española plantea desafíos humanitarios y logísticos, ya que las autoridades trabajan arduamente para abordar la situación y garantizar la seguridad y el bienestar de los inmigrantes. La Cruz Roja desempeña un papel crucial en proporcionar asistencia y apoyo a aquellos que buscan un nuevo comienzo en tierras españolas.