El presidente de la Fundación Ibn Tufayl de Estudios Árabes, Antonio Figueroa, ha dirigido una carta al Concejal de Turismo del Ayuntamiento de Almería, D. Joaquín Pérez de la Blanca, instándole a que retire de manera inmediata las señalizaciones de unas supuestas "juderías" en lugares donde nunca existieron.
Esta petición se suma a la realizada previamente por la Sociedad Española de Estudios Árabes (SEEA), argumentando que estas señalizaciones carecen de rigor histórico y dan veracidad a una falsa realidad histórica.
Según Figueroa, es un despropósito haber tramitado la petición del presidente de la red cultural judía 'Tarbut Sefarad', Carmelo López, y de Elodia Ortiz, presidenta del Foro Almería Centro, sin ningún tipo de rigor histórico. Además, considera un mayor desatino mantener estas placas, ya que una institución pública de prestigio como el Ayuntamiento de Almería no debería difundir bulos históricos que puedan responder a intereses espurios.
La Fundación Ibn Tufayl argumenta que estas placas pretenden "judeizar" puntos claves de la ciudad de Almería, fundada por los árabes en el 955, que son claramente de origen islámico y no judío. Por ejemplo, señalan que la Iglesia de San Roque, ubicada extramuros, no se encontraba en ninguna judería, sino que era una rábita musulmana que presidía el cementerio islámico del arrabal de al-Hawd. Del mismo modo, indican que la Plaza Manuel Pérez García, donde se ha ubicado otra placa de "Judería", se encontraba en realidad la principal puerta de la Almería musulmana, la Puerta de Pechina, en lugar de una judería.
Ante estos argumentos, la Fundación Ibn Tufayl solicita la retirada inmediata de las placas y propone al Ayuntamiento de Almería la colocación de nuevas señalizaciones históricas, elaboradas con rigor histórico y sin ningún símbolo doctrinario, para informar a los ciudadanos sobre los puntos cruciales de la historia de la ciudad.
Se espera que el Ayuntamiento de Almería considere esta solicitud y otorgue una cita para discutir la propuesta detalladamente, junto con otros especialistas en la historia de la ciudad, con el objetivo de llegar a un acuerdo que refleje adecuadamente la historia y el patrimonio cultural de Almería, sin distorsiones ni controversias.