La provincia de Almería ha sido testigo de intensas condiciones climáticas en las últimas horas, con nevadas y vientos que han dejado su marca en varias zonas. En el aeropuerto de Almería, las ráfagas de viento han dificultado significativamente las operaciones de aterrizaje y despegue de los aviones, desafiando la destreza de los pilotos. Un vuelo con destino a Melilla tuvo que ser desviado a Málaga debido a las condiciones climáticas adversas. En la ermita de María, una inusual capa de nieve ha cubierto el terreno, mientras que en la comarca de Los Vélez, las temperaturas han caído por debajo de cero.
En el barrio de Costacabana, cerca del aeropuerto, el viento ha causado daños importantes, volando parte del techo y la fachada de la piscina del complejo municipal Jairán. Aunque las máquinas han estado trabajando desde tempranas horas para prevenir mayores daños, los residentes expresan su preocupación por la falta de intervención anterior, especialmente ante las ráfagas de viento que superaron los 83 kilómetros por hora.
Afortunadamente, no se han reportado desgracias hasta el momento, si bien los residentes comentan que algunas chapas metálicas han sido arrastradas por el viento, generando temor entre la comunidad. Las labores de limpieza y reparación están en marcha, aunque se han detenido temporalmente debido a la hora del almuerzo. Los vecinos instan a una acción más proactiva por parte de las autoridades municipales para evitar situaciones similares en el futuro.