El secretario de Organización del PSOE de Almería, Antonio Martínez Rodríguez, ha criticado duramente al Gobierno andaluz de Juanma Moreno por lo que considera argumentos falsos para justificar las restricciones de agua impuestas a los habitantes y empresas del Levante almeriense. Martínez Rodríguez ha insistido en la necesidad “urgente” de que la Junta del PP elimine dichas limitaciones porque “no se sostienen de ninguna manera”.
Según Martínez Rodríguez, el Gobierno de Moreno ha ocultado en todas las normas y planes de sequía que ha aprobado el hecho de que desde 2014, el 95% del agua que suministra Galasa, la empresa gestionada por el PP en la Diputación, “es desalada y procede de Carboneras”. Además, señala que no se hace referencia alguna en esos planes a que exista un problema con la potabilización del agua procedente de los trasvases.
Martínez Rodríguez ha aclarado que “fue Galasa la que en 2014 decidió cambiar el agua que suministraba, parando su potabilizadora dejando de tratar el agua de los trasvases, para suministrar la desalada que no necesitaba ser potabilizada”. Según él, ni la Diputación ni Galasa pidieron a la Junta de Andalucía en otras etapas que reparara la potabilizadora, simplemente porque no estaba rota, estaba parada.
El senador socialista ha acusado al Gobierno de Moreno de engañar al señalar en los planes de sequía que ha aprobado que el abastecimiento depende de los trasvases cuando no es verdad. También ha criticado al PP por no recoger en los documentos la posibilidad del suministro de agua desde la desaladora de Águilas ni de disponer de los recursos acumulados procedentes del Tajo-Segura.
Martínez Rodríguez ha recordado que Almería tiene disponibles en Murcia unos 20 hectómetros de agua acumulados, pero eso no se menciona en el último decreto de sequía de febrero de este año. También ha señalado un riesgo muy grave, como es la contaminación de los pozos de Bernal por radioactividad, un problema que afecta a 300.000 personas y que deja sin alternativa a Almería y Roquetas de Mar en caso de rotura de la desaladora.
Finalmente, el secretario de Organización del PSOE de Almería ha criticado el desconocimiento del delegado provincial sobre el uso del agua procedente de las nuevas desaladoras. Según él, cuando la Junta responde a su petición de eliminar las restricciones, acude a las obras del Estado para justificar la falta de garantía para consumo humano, olvidando que estas no están previstas para aportar recursos para abastecimiento, sino para regadío.