Estamos a muy poco de caer en la mayor trampa que jamás se haya ideado para el campo almeriense. Para el campo en general, pero puestos a luchar, a mi lo que hoy me preocupa es lo que le pase al agricultor de Níjar, le vote a quien le vote, porque si sus productos terminan bloqueados en la frontera se nos cae la economía. Vamos, que ni haciéndonos todos vegetarianos o veganos tendríamos capacidad para poder comernos nosotros mismos todo lo que se produce aquí, y no contemos ya con otras provincias.
Y la amenaza es real. Lo estamos viendo en los informativos, pero no lo estamos entendiendo y el muy claro. Si la ultraderecha consigue los votos suficientes para entrar en el gobierno europeo, el primer golpe de efecto será el bloqueo de la producción española, a la que acusan de jugar con las cartas marcadas. El problema es que estos tipos no entienden que aquí los invernaderos funcionan sin calefacción, pero da igual, se creen que aquí hay muchas más subvenciones de las que se reciben y las van cortar de raíz.
La ultraderecha europea promueve un nacionalismo económico que incluye la imposición de aranceles y restricciones comerciales. Almería exporta más del 95% de su producción agrícola, y cualquier medida que dificulte el comercio intra europeo afectará negativamente a los agricultores. Por ejemplo, la salida del Reino Unido de la Unión Europea, impulsada en parte por movimientos de derecha, ha tenido repercusiones económicas significativas en el comercio agrícola con Europa. Las barreras comerciales y la incertidumbre económica pueden tener efectos perjudiciales en las exportaciones agrícolas, reduciendo los ingresos y la estabilidad del sector, y no lo digo, lo dice la FAO en su informe 2020
Y ahora si eres agricultor toma nota. Las barreras al comercio internacional representan la mayor amenaza a la que jamás se ha enfrentado la agricultura en Almería, y si lo unimos a políticas populistas en cuanto a la inmigración o la falta de compromiso con la sostenibilidad ambiental, tenemos el clima perfecto para la rebelión contra nosotros. Estas políticas llevarán a una reducción de la mano de obra disponible, aumentarán los costos operativos, y dificultarán el acceso a mercados internacionales, todo lo cual le pega en la línea de flotación a la competitividad y viabilidad del sector agrícola en la región.
Y ahora que yo la sabes, si quieres vas y votas a la ultraderecha o al PP para que pacte con ellos, porque solos no van a llegar. Pero si les vota, luego no te quejes, que desde el PSOE te estamos diciendo desde hace más de 40 años lo es Europa y los peligros que vienen. Y claro, tomates, entre nosotros, nos podemos comer unos cuantos, pero no todos.