Hoy, el transporte en autobús ha enfrentado serias complicaciones en Almería debido a la huelga convocada a nivel nacional que afecta al sector del transporte por carretera de viajeros, tanto urbano como interurbano. La capital almeriense ha sentido especialmente el impacto, ya que una gran parte de la plantilla de Surbus ha decidido adherirse al paro. Los servicios mínimos establecidos han alcanzado un 50%, lo que ha limitado la operatividad habitual del servicio.
En la provincia de Almería, alrededor de 1.300 trabajadores están empleados en diversas empresas de autobuses. Según los datos disponibles, el 99% de estos trabajadores, que no se encuentran bajo los servicios mínimos, han secundado la huelga. Esto significa que solo una fracción del personal está operando actualmente, lo que ha generado un notable descontento entre los usuarios del transporte público.
Las centrales sindicales que han convocado esta protesta argumentan que la situación actual es insostenible y pone en riesgo la seguridad de los pasajeros. Francisco Calatrava, representante del CSIF, destacó que "el 50% de servicios mínimos se está cumpliendo como no podía ser de otra manera para darle servicios ya que son unos servicios esenciales a los viajeros". Esta afirmación subraya la importancia de mantener un mínimo operativo ante la crisis.
Por su parte, David Siles de UGT criticó las políticas actuales del Gobierno estatal respecto a los permisos de conducir: "No es normal que hoy en día el gobierno esté intentando endurecer los permisos de conducir con 65 años y haya conductores y conductoras de autobús que llevan personas que no se puedan jubilar hasta los 67 años". Este comentario refleja las preocupaciones sobre las condiciones laborales y las expectativas de jubilación para los conductores.
José Haro, portavoz de CCOO, advirtió sobre la posibilidad de una escalada en las movilizaciones si no se llega a un acuerdo: "Si esto no para aquí, hoy es el primer día de convocatoria de huelga a nivel nacional; continuará con tres días en el mes de noviembre, dos días en diciembre y posteriormente una huelga indefinida". Además, hizo hincapié en la necesidad de establecer una jubilación parcial voluntaria que permita a los trabajadores optar por retirarse anticipadamente si así lo desean. Esta jubilación podría alcanzar hasta el 75% y permitiría acumular jornadas laborales.
Los servicios mínimos fijados garantizan un porcentaje específico del transporte urbano, pero las previsiones indican un aumento significativo en la demanda. Se estima que más de 100.000 personas adicionales utilizarán el transporte urbano durante este periodo crítico.
La situación actual plantea desafíos importantes tanto para los trabajadores como para los usuarios del sistema de transporte público en Almería. La continuidad del conflicto laboral dependerá en gran medida del diálogo entre las partes involucradas y su capacidad para encontrar soluciones adecuadas a las demandas planteadas por los sindicatos.