El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Roquetas de Mar ha dado luz verde a la entrega del cuerpo del doctor Rafael Piorno Fermoselle a sus familiares, tras verificar que "todo estaba en regla" después de realizar pruebas forenses relacionadas con su fallecimiento el pasado mes de agosto. La muerte del médico se produjo en el contexto de un supuesto robo frustrado en su vivienda, ubicada en este municipio almeriense.
Este martes, la instructora autorizó la entrega de los restos mortales del facultativo, y se espera que este jueves tome declaración al hijo del agente de Policía Nacional implicado, quien actualmente se encuentra en prisión provisional. Este joven es señalado como el presunto ideólogo del asalto que resultó fatal para Piorno.
La declaración está programada para las 11:30 horas y tiene como objetivo esclarecer si existe alguna conexión entre el hijo del policía y los hechos que llevaron a la detención de su padre, así como del supuesto autor material del crimen, quien habría viajado desde León para participar en el asalto. La investigación se centra en determinar si hubo colaboración por parte del hijo, ya que supuestamente fue él quien puso en contacto a su padre con el otro implicado.
El caso también involucra a la pareja del agente policial, quien es investigada por ser propietaria del vehículo utilizado durante los hechos. Las defensas de los dos detenidos han rechazado la idea de que la muerte del médico fuera premeditada, argumentando que se trató de un robo fallido.
Durante una reconstrucción llevada a cabo el pasado 22 de octubre en la vivienda del médico, situada en la calle Enrique Granados y que estaba a la venta, las defensas sostuvieron que el intento de robo llevó a Piorno a emplear algún "instrumento peligroso" para "defender su hogar", lo que derivó en un forcejeo y finalmente en su apuñalamiento.
Se ha informado que el agente detenido había sido paciente del médico y conocía sus rutinas diarias. Según las defensas, esto le permitió planear el robo bajo el pretexto de una posible compra de la casa. Los acusados habrían llegado alrededor de las 15:45 horas del 23 de agosto, preparados para cometer el delito.
Los investigadores encontraron un táser en la escena, lo que indica que uno de los sospechosos atacó al médico al abrirle la puerta. En medio del altercado, Piorno pudo haber intentado defenderse con un cuchillo antes de ser apuñalado hasta tres veces. Tras cometer el crimen, ambos sospechosos intentaron limpiar los restos y eliminar cualquier evidencia antes de abandonar la vivienda.
El cuerpo sin vida del doctor Piorno fue hallado dos días después gracias al aviso de un vecino. Presentaba múltiples heridas punzantes y estaba maniatado. Actualmente, tanto el agente como su cómplice enfrentan cargos por homicidio y robo con violencia mientras continúa la instrucción judicial.
Las autoridades también han realizado registros relacionados con el caso en Almería y León, donde se han encontrado diversos objetos vinculados a los delitos investigados, incluyendo armas y munición.