La naviera Armas Trasmediterránea ha comunicado que, a partir del 1 de enero de 2025, cesará sus operaciones en las rutas marítimas entre Melilla y Málaga. Esta decisión se produce tras la reciente adjudicación por parte del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible de dos líneas que han sido declaradas como obligación de servicio público (OSP).
Con este cambio, la compañía enfocará sus esfuerzos en fortalecer las conexiones entre Melilla y los puertos de Almería y Motril, en Granada. Este movimiento responde a una estrategia para optimizar su red de servicios en la región.
La decisión de Trasmediterránea marca un nuevo capítulo en el transporte marítimo entre estas localidades. La empresa busca adaptarse a las necesidades del mercado y ofrecer alternativas más eficientes a los viajeros y mercancías que transitan por estas rutas.
El cierre de la línea Melilla-Málaga podría generar cambios significativos en la dinámica del transporte entre estas ciudades, afectando tanto a los usuarios habituales como al comercio local.
Almería y Motril se beneficiarán directamente de esta reorientación, lo que podría traducirse en un aumento del tráfico marítimo y un impulso económico para ambas localidades. La naviera espera que esta estrategia no solo mejore su operativa, sino que también contribuya al desarrollo regional.
Los detalles sobre cómo se implementarán estos cambios están aún por definirse, pero la empresa está comprometida con asegurar una transición fluida para todos los usuarios afectados por esta modificación en sus servicios.