El club Padre Huelin realiza una excelente labor social a través del deporte con los niños y niñas de los barrios de Los Almendros, Piedras Redondas y Araceli, que no ha parado en Navidad. Durante estas fiestas, en las que los pequeños tienen más tiempo libre, ha organizado actividades de ajedrez, klash y baloncesto, con las que ha mejorado la técnica de los jugadores y ha permitido que juntos disfruten de la práctica deportiva.
En concreto, se ha celebrado un taller de klash, el deporte de mesa, similar al fútbol sobre un tablero y con el uso de un imán, importado de los países nórdicos. El club es pionero en Almería en su práctica. Se celebró en la Casa de Hermandad del Perdón.
Así mismo, el club Padre Huelin organizó un entrenamiento con César Revueltas, entrenador superior de baloncesto, que se llevó a cabo en el colegio Ángel Suquía, y que permitió a los niños y niñas mejorar sus conocimientos prácticos sobre este deporte, en una jornada muy interesante y didáctica.
Por último, celebraron una actividad de ajedrez, un deporte con numerosos adeptos en estos tres barrios.
El concejal de Ciudad Activa, Movilidad Urbana y Deporte, Antonio Casimiro, asistió a la actividad de baloncesto, acompañado por el concejal de Integración Social, Participación y Distritos, Óscar Bleda. En esta línea, Antonio Casimiro destaca “la labor importantísima que realiza el club deportivo Padre Huelin en estos tres barrios, en los que el deporte se convierte en herramienta de cohesión social y permite generar hábitos saludables entre los más pequeños. Es admirable el esfuerzo de su presidente, Cristóbal Hernández, y sabe que tiene nuestro apoyo”.
Por su parte, Cristóbal Hernández, asegura que “los niños y niñas han respondido muy positivamente a las actividades que hemos organizado, y nos encontramos muy satisfechos de la labor que realizamos. Se favorece el sentimiento de identidad con el barrio muy importante”.
Además, el club Padre Huelin ha organizado un concurso de tarjetas navideñas, en el que han participado más de 250 niños y niñas de los barrios de Los Almendros, Piedras Redondas y Araceli, y que se expusieron en el colegio Ángel Suquía de Los Almendros.