El 2024 ha sido un mal año para el PP andaluz tras destaparse el que puede terminar siendo el mayor caso de corrupción y fraude en la contratación sanitaria. Un caso que ya cuenta con tres altos cargos imputados, entre ellos la actual gerente del SAS y sus dos predecesores. Hay, al menos, 243 millones en desvíos a la sanidad privada a través de contratos de emergencia a dedo basados en normas derogadas, una vez finalizada la pandemia, y más de 1.200 millones en contratos irregulares que se han fragmentado de forma fraudulenta. La Intervención de la Junta ha realizado 18 informes desfavorables sobre este sistema de contratación empleado por el PP. Moreno Bonilla, lejos de entonar el mea culpa, ha huido hacia adelante y ha cesado a la interventora general por hacer su trabajo.
Nada es casual en materia sanitaria desde que el PP manda en la Junta. El Gobierno andaluz da anualmente 100 millones de euros más a las privadas de lo presupuestado y las transferencias suben cada año como la espuma –este año van a ser 700 millones-. Desde que Moreno Bonilla está en San Telmo se deriva un 70% más de dinero público a la sanidad privada de lo que se hacía –por circunstancias muy concretas y extraordinarias- con los gobiernos del PSOE. Y de todos los contratos que se hacen, el 80% se lo llevan las mismas seis clínicas. Todas juntas son muchas casualidades, como la de que el exviceconsejero diera 44 millones de euros a la empresa que, posteriormente, le iba a contratar.
Así es el PP y así es Moreno Bonilla. El presidente andaluz está mostrando su auténtica cara, la de un aniquilador de lo público sin el menor de los escrúpulos. El 2024 habrá sido un mal año para los ‘populares’ tras descubrirse el ‘pastel’, pero no tiene ni punto de comparación con lo sufrido por los pacientes; y la situación, lejos de mejorar, empeora. Moreno Bonilla prometió esperas de 60 días para una operación, cuando la media es 173; 15 días para un especialista, cuando son 140 días para Traumatología, 357 días para Cirugía Vascular o 238 para Neurología. ¿Qué le está sugiriendo el presidente de la Junta a los pacientes con esta demora? Que quien tenga prisa, eche mano al bolsillo y se vaya a una clínica privada que allí, lo mismo, le atienden antes teniendo en cuenta que trabajan por las tardes al mismo ritmo que por las mañanas cosa que, en la pública, y también es casualidad, no ocurre.