El sindicato CSIF de Almería ha denunciado públicamente lo que ellos consideran un "colapso" en el sistema sanitario de la provincia, destacando problemas significativos en la atención primaria y en los servicios de urgencias de varios hospitales. Según el sindicato, la falta de personal y el aumento de pacientes con enfermedades respiratorias y contagios por COVID-19 han llevado a una situación crítica en varios centros médicos, incluido el Hospital Universitario Torrecárdenas.
La denuncia del CSIF se contrapone con las declaraciones del delegado de Salud de la Junta de Andalucía en Almería, Juan de la Cruz Belmonte, quien ha asegurado que "No existe colapso, la normalidad es absoluta en el funcionamiento y lo que pasa es que tenemos puntualmente algunos picos de incidencia". Belmonte enfatizó que estos picos de incidencia se manejan dentro del plan de alta frecuentación establecido para esta temporada, resolviéndose de manera rápida para reactivar la actividad normal.
El sindicato ha señalado específicamente incidentes como la saturación de las UCI del Hospital Torrecárdenas, donde solo 20 de las 28 camas disponibles están operativas debido a la falta de personal. Además, CSIF ha criticado la gestión de la sanidad por parte de la administración, afirmando que la situación actual afecta negativamente tanto a los pacientes como al personal sanitario.
Por su parte, Belmonte defendió que el plan de contingencia está diseñado para absorber estos "picos" de demanda, asegurando que el sistema es capaz de adaptarse y gestionar estas situaciones sin que se llegue a un estado de colapso. No obstante, el sindicato y varios profesionales del sector mantienen su postura crítica, pidiendo más recursos y personal para abordar lo que ellos ven como una crisis inminente en la sanidad pública de Almería.
CSIF refleja una preocupación generalizada por la capacidad del sistema de salud para manejar la demanda actual, especialmente en momentos de alta incidencia de enfermedades. Mientras que Belmonte insiste en la normalidad y en la eficacia de los protocolos existentes, el CSIF advierte de un sistema al borde de su capacidad, urgiendo a acciones inmediatas para prevenir un colapso mayor.