www.noticiasdealmeria.com
Nada de esto fue un error
Ampliar

Nada de esto fue un error

Por Rafael M. Martos
x
directornoticiasdealmeriacom/8/8/26
https://www.noticiasdealmeria.com
martes 21 de mayo de 2024, 06:00h

google+

Comentar

Imprimir

Enviar

Add to Flipboard Magazine. Compartir en Meneame

Escucha la noticia

La precampaña electoral para las próximas elecciones europeas ha comenzado con una serie de despropósitos de difícil explicación, y de consecuencias aún por calibrar, pero que dejan en evidencia la inconsistencia ideológica de algunas opciones políticas, y también de algunos dirigentes.

Hasta tal punto llega la cosa, que la política internacional, que tradicionalmente se ha regido por un código de conducta diplomático y respetuoso, parece haberse desviado hacia un terreno más hostil y personalista.

El incidente protagonizado por el presidente de Argentina, Javier Milei, es un claro ejemplo de esta tendencia. Su participación en un acto de Vox, Viva24, y sus declaraciones contra la esposa del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, han sido percibidas no solo como un ataque personal sino también como una falta de respeto hacia la figura presidencial y su familia. Este tipo de comportamiento no solo es inapropiado sino que también demuestra la inmadurez de quien así se comporta.

Que Sánchez no acudiera a la toma de posesión de Milei, sencillamente porque no es de cuerda ideológica, olvidando que preside España, y que España no solo es un Estado plural, sino que tiene intereses económicos y sociales con Argentina, que eso está por encima de sus preferencias personales, no ayuda, claro, pero si a eso se le añaden las palabras del ministro Óscar Puente, aduciendo el consumo de "sustancias" por parte del argentino, pues tampoco es ese el mejor camino para el reencuentro.

Pero precisamente porque eso ha sido el comportamiento del Gobierno de España, Milei debería haber venido a "vender" su proyecto político y a animar a votar a su anfitrión, y nada más. Todo lo demás, sobraba.

Además, la respuesta del ministro de Exteriores español, que calificó el incidente como un ataque a la soberanía española, parece exagerada y confunde los asuntos personales con los estatales. Es fundamental distinguir entre las críticas dirigidas a individuos y aquellas que afectan a la nación en su conjunto. La "soberanía nacional" no ha sido insultada ni menospreciada porque alguien insulte a la esposa del presidente, ni tan siquiera al presidente, porque la "nación" y su "soberanía" trasciende a ambos.

Por otro lado, la estrategia de Vox de invitar a figuras políticas controvertidas como el Frente Nacional francés y representantes del partido de Orban en Hungría, envía mensajes contradictorios. Fueron los de Le Pen los principales promotores de los ataques a los camiones con productos agrícolas españoles, y los húngaros son los valedores de los intereses de Vladimir Putin en Europa. Estas acciones ponen en duda la coherencia y la sinceridad de sus posturas políticas.

Finalmente, el intento de Santiago Abascal de vincular al Partido Popular con las políticas de Podemos a través de la polémica del cartel de Almería es un claro intento de manipulación política. Y es que mientras la exministra de Podemos Irene Montero, dijo claramente que "los niños, las niñas, y les niñes" eran libres de tener relaciones sexuales con quien quisieran, el Ayuntamiento de Almería reconoció el mensaje confuso y por tanto erróneo del cartel en cuestión y procedió a retirarlo inmediatamente. No se puede equiparar a quien reconoce un error y lo subsana, con quien cree que no se ha equivocado e insiste en ello.

Pues eso, que Vox insiste en ello, y por tanto, nada de esto fue un error.

Rafael M. Martos

Editor de Noticias de Almería

Periodista. Autor de "No les va a gustar", "Palomares en los papeles secretos EEUU", "Bandera de la infamia", "Más allá del cementerio azul", "Covid19: Diario del confinamiento" y la novela "Todo por la patria"