El Pleno del Ayuntamiento de Almería ha vuelto a rechazar, sin el apoyo del Grupo municipal socialista y con la abstención de Podemos, la propuesta del Gobierno de cobrar peajes en las autovías, aprobando la moción presentada por el Grupo Municipal Popular, como parte de las mociones que hoy se han debatido por parte de la Corporación.
Veinte meses después, el Grupo Popular volvía a solicitar el rechazo a los planes del Gobierno presidido por Pedro Sánchez para imponer un sistema de pago por el uso de la red de autovías estatales. La misma posición contraria, y única, del grupo socialista ha encontrado la iniciativa de los populares frente a una medida “que grava fundamentalmente a las clases medias. Los ricos pagarían por circular por las autovías, pero también los desempleados, los jubilados, los autónomos, los mileuristas, todos menos el señor Sánchez que viaja en avión o helicóptero”, ha denunciado la concejala de Urbanismo, Ana Martínez Labella, ponente de la moción.
Para la edil popular resulta “frustrante” pedir lo imposible al Grupo Municipal Socialista, “defender los intereses de los almerienses frente a las siglas que representan. No se les puede pedir aquello que no les sale de dentro. Su defensa se limita a unas siglas y a un partido”.
Peajes injustos
“Nos parece absolutamente injusta la propuesta. Injusta e impuesta de forma unilateral”, ha criticado la edil popular, recordando que estando las autovías ya construidas y en servicio, “no tiene sentido sino es por el afán recaudatorio de este gobierno pagar dos veces por la misma cosa. ¿Se imaginan tener que pagar por circular por la A-92 después de todo lo que tuvimos que luchar para que llegara a Almería?. Kafkiano”, matizaba Martínez Labella.
En defensa de esta moción ha recalcado que la implantación del sistema de peaje, en el caso de Almería, perjudicaría enormemente al sector agroalimentario, que en un 90 por ciento utiliza el transporte por carretera como sistema de distribución. “Introducir el pago de peajes supondría disparar los costes y la pérdida de competitividad de nuestros productos en el mercado, ya que el producto se encarecería, sin olvidarnos además que ello conllevaría una pérdida añadida del poder adquisitivo y una mayor desigualdad entre los españoles”, ha denunciado.