El Consejo General de Economistas (CGE) ha revisado al alza su previsión de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) para 2024, situándola en el 3,1%, lo que representa un incremento de una décima respecto a estimaciones anteriores. En contraste, la proyección para 2025 se mantiene en un 2,4%.
De acuerdo con el último informe del ‘Observatorio Financiero del Consejo General de Economistas’, la actividad económica durante los primeros tres trimestres de 2024 ha superado las expectativas iniciales, registrando incrementos superiores al 0,80% trimestral. Este crecimiento ha sido impulsado principalmente por la fortaleza del consumo público. Sin embargo, se anticipa un descenso en el ritmo de crecimiento para el último trimestre del año, situándose entre el 0,5% y el 0,6%, debido a factores como el impacto negativo de la DANA que afectó a varias provincias españolas a finales de octubre y principios de noviembre.
Desafíos económicos en el horizonte
A pesar de este panorama optimista, los economistas advierten que la economía podría enfrentar desafíos en 2025 relacionados con tensiones geopolíticas y cambios en las políticas económicas de socios comerciales europeos. Esta situación explica la moderación esperada en el crecimiento económico para ese año, proyectado en 2,4%, siete décimas menos que en 2024.
En cuanto a la inflación, esta ha mostrado una tendencia a la baja durante 2024, alcanzando su punto más bajo en septiembre con un -0,6% mensual y un 1,5% interanual. No obstante, se ha registrado un repunte en el último trimestre del año, cerrando diciembre en un 2,8%, aunque aún por debajo de los niveles observados a finales de 2023.
Perspectivas laborales y fiscales
Para 2025, el CGE prevé una reducción adicional de la inflación hasta alcanzar el 2%. Sin embargo, también advierte sobre la presión al alza en los precios de alimentos y energía debido a la eliminación de la rebaja del IVA en productos básicos y electricidad.
El mercado laboral ha mostrado una notable resistencia en 2024. Se ha producido una disminución del paro que afecta a 146.738 personas, junto con la creación de 501.952 empleos, lo que eleva la afiliación a la Seguridad Social a 21,33 millones. Esto ha llevado al CGE a ajustar su previsión de tasa de paro para este año al 11,2%.
No obstante, se espera una desaceleración en la creación de empleo para 2025, con una caída proyectada de la tasa de paro hasta el 10,8%.
Dificultades financieras persistentes
El déficit público se ubicó en el 3,2% del PIB en septiembre, y se estima que cerrará 2024 en un 3,4%, dos décimas por encima de las previsiones iniciales debido al gasto extraordinario vinculado con la DANA. Para 2025, se proyecta que este déficit podría reducirse al 2,9%, siempre que se cumplan las expectativas de crecimiento económico.
En relación con la deuda pública, se observa una mejora en su ratio respecto al PIB; se espera que cierre 2024 en un 103,1%% y descienda al 102,8%% en 2025 si las proyecciones económicas se concretan. Sin embargo, persiste preocupación por el aumento del peso de los intereses sobre las cuentas públicas.
En conclusión, aunque las perspectivas económicas para 2025 sugieren un crecimiento sostenido del PIB y una moderación tanto en inflación como déficit público, los retos vinculados al desempleo elevado y a la deuda pública continúan siendo significativos.
La noticia en cifras
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| Categoría |
Valor |
| Crecimiento PIB 2024 |
3,1% |
| Crecimiento PIB 2025 |
2,4% |
| Tasa de paro 2024 |
11,2% |
| Tasa de paro 2025 |
10,8% |
| Déficit público 2024 |
3,4% |
| Déficit público 2025 |
2,9% |
| Deuda pública respecto al PIB 2024 |
103,1% |
| Deuda pública respecto al PIB 2025 |
102,8% |
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