La vicesecretaria general del PSOE-A, María Márquez, ha manifestado que la actual vicepresidenta primera del Gobierno y secretaria general de la federación socialista andaluza, María Jesús Montero, se encargará de culminar la demolición del hotel del Algarrobico, ubicado en Carboneras (Almería), "cuando sea presidenta de la Junta", a menos que el PP-A colabore antes desde la administración autonómica para hacer efectivo dicho derribo.
Durante una rueda de prensa en el Parlamento andaluz, Márquez destacó que la reciente publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) sobre la declaración de utilidad pública es un paso crucial para iniciar la expropiación tanto de los terrenos como del inmueble que invade la zona de servidumbre en el litoral. Este anuncio se produce tras una propuesta realizada por Montero durante su visita al terreno donde se sitúa el hotel.
Críticas al Gobierno Andaluz
Márquez subrayó que esta declaración "es el paso previo a la expropiación" y criticó que hasta ahora "el Gobierno de la Junta de Andalucía no ha tenido la capacidad de liderar este asunto". Además, propuso anular la licencia como una opción más rápida para conseguir el objetivo del derribo. La portavoz socialista también señaló que tres días antes del anuncio del Gobierno central, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía había hecho una propuesta similar al Ejecutivo andaluz, que "había dicho que no".
En este sentido, consideró que el Gobierno del PP-A, liderado por Juanma Moreno, está actuando como "el perro del hortelano", instando a los populares a no confundir ni engañar a los ciudadanos. Además, sugirió que podría haber intereses ocultos por parte del Partido Popular en relación con este tema y advirtió: "si es así, nos lo tendrían que explicar".
Afirmaciones sobre el futuro del derribo
A pesar de las críticas, Márquez aseguró que "el derribo del hotel se va a producir sí o sí", destacando que el 40% del terreno dependiente del Gobierno de España será gestionado con Montero como vicepresidenta y el 60% restante bajo su liderazgo cuando asuma como presidenta. La representante socialista enfatizó que "le guste o no al señor Moreno Bonilla", este proceso se llevará a cabo.
Asimismo, expresó su deseo de que no haya aspectos ocultos en este asunto y afirmó: "el tiempo es el mayor aliado de la verdad". Ante las preguntas de los periodistas sobre posibles mentiras por parte del Gobierno andaluz, Márquez dejó claro que existe una sospecha si hay desinformación y pidió claridad sobre las intenciones del PP-A respecto a este tema.
Diálogo y transparencia exigidos
Finalmente, subrayó la importancia de un diálogo sincero entre las partes implicadas y reiteró que el PSOE tiene claro su plan dentro de sus competencias. Enfatizó su disposición para dialogar con el Gobierno andaluz sobre cualquier asunto relevante para Andalucía y exigió al Ejecutivo de Juanma Moreno un diálogo auténtico que priorice los intereses de los ciudadanos.