El entrenador de la UD Almería, Rubi, se presentó en la sala de prensa de Castalia tras una nueva jornada en la que el equipo no logró sumar puntos a domicilio. A pesar de la derrota ante el conjunto castellonense, Rubi analizó el encuentro con un enfoque constructivo. “He visto un partido bastante igualado en la primera parte. Hemos conseguido adelantarnos y ellos no nos han generado demasiado peligro, aunque la presión tras pérdida del Castellón nos ha hecho mucho daño”, comentó el técnico.
Sin embargo, reconoció que “a partir del minuto sesenta nos hemos deshecho como un azucarillo” y lamentó que “fuera de casa no estamos dando con la tecla”. Este análisis honesto refleja su compromiso por mejorar y encontrar soluciones para el equipo.
Reflexiones sobre el rendimiento
Rubi también destacó las virtudes del rival mientras hacía autocrítica sobre algunas situaciones en las que su equipo no estuvo a la altura. “A la hora de atacar es verdad que la presión del Castellón ha sido fuerte todo el encuentro, nos ha costado sacar el balón jugado; no hemos estado precisos en ciertas ocasiones”, afirmó. Además, mencionó que “a nivel defensivo han sido dos centros laterales muy mal defendidos que nos han costado el partido”.
A pesar de los desafíos, Rubi se mostró optimista respecto al futuro. Se disculpó sinceramente con los aficionados desplazados a Castellón: “Está siendo un déjà vu cada partido fuera de casa. Quiero pedir disculpas para la gente que viaja porque no le estamos dando nada”. Sin embargo, dejó claro que el equipo tiene un plan: “El plan de partido ha salido bien de inicio, pero enseguida parece que vamos desapareciendo. Nos toca pensar en ganar los dos de casa y en llegar lo más fuerte mentalmente a una situación final de Liga”.