www.noticiasdealmeria.com
Pedro Sánchez es unidireccional
Ampliar
(Foto: malasombra)

Pedro Sánchez es unidireccional

Por Rafael M. Martos
x
directornoticiasdealmeriacom/8/8/26
https://www.noticiasdealmeria.com
viernes 07 de junio de 2024, 05:00h

google+

Comentar

Imprimir

Enviar

Add to Flipboard Magazine. Compartir en Meneame

Escucha la noticia

En el ámbito político, es evidente el temor que muchos líderes tienen hacia la prensa. Este miedo se manifiesta en dos niveles: un miedo general de los políticos hacia los medios de comunicación y un miedo específico de ciertos políticos hacia periodistas o medios particulares. Este fenómeno se hizo particularmente evidente con la reciente segunda carta a los corintios... digo, a la ciudadanía del presidente Pedro Sánchez. Lo que más me llama la atención no es tanto el contenido de la carta, sino el formato: una carta, un mensaje unidireccional, sin oportunidad para preguntas o réplica.

A menudo, las estrategias políticas se vuelven en contra de quienes las utilizan. Un ejemplo claro de esto es el ex presidente Mariano Rajoy, quien, en el apogeo del caso Gürtel, decidió implementar un gesto de transparencia al permitir que los periodistas siguieran sus explicaciones a la cúpula del Partido Popular a través de un plasma. Lo que en principio parecía un acto de apertura (esas reuniones siempre eran a puerta cerrada), terminó reforzando la percepción de que Rajoy evitaba el contacto directo con la prensa, convirtiéndose en el "presidente del plasma". Esta estrategia, destinada a controlar el mensaje y evitar preguntas incómodas, se volvió en su contra.

En la actualidad, Pedro Sánchez parece seguir una estrategia similar al optar por el género epistolar para comunicarse con la ciudadanía. La carta es una herramienta unidireccional que le permite exponer su punto de vista sin ser cuestionado. Este método refleja un temor subyacente a enfrentarse a preguntas incómodas y a la crítica mediática. Sánchez ha concedido pocas entrevistas y, cuando lo hace, prefiere medios que considera afines. Sin embargo, incluso en estos medios, algunos periodistas deciden ejercer su profesión con integridad, haciendo preguntas incómodas que el presidente prefiere evitar.

El miedo a la prensa no solo se evidencia en las entrevistas limitadas y seleccionadas. En Moncloa, muchos medios de comunicación que tienen una línea editoral crítica, llevan meses sin obtener un turno de palabra en las ruedas de prensa del Consejo de Ministros. Incluso hay medios nativos digitales que nunca han tenido la oportunidad de preguntar en estas ruedas de prensa. Cuando se permite la intervención de un periodista, a menudo es alguien considerado afín, lo que socava la transparencia y la rendición de cuentas que debería caracterizar a un gobierno democrático.

Un caso reciente que ilustra esta dinámica es la citación judicial de Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez. En lugar de permitir que la prensa formule preguntas y obtenga respuestas claras, la administración prefiere mantener el control del mensaje. Es lógico pensar que Begoña Gómez, siendo la principal implicada, debería ser la primera en dar explicaciones. Solo después de que ella aclare su situación, se podría considerar la posible responsabilidad de su marido. La ausencia de este proceso transparenta la falta de rendición de cuentas y refuerza la percepción de que se oculta información.

Porque de ahí solo podemos colegir dos cosas. Una es que Gómez, a pesar de ser directora de una cátedra sin ser ni tan siquiera tener titulación universitaria, es incapaz de responder de sus acciones ante los medios de comunicación; la otra es que el presidente es un machirulo protector... enamorado, sí, pero profundamente machista... y contradictorio, pues si, como insiste, se ataca la actividad laboral de su esposa, debería ser ella quien se defendiera... y si como también justifica, el ataque a ella es para "quebrarlo" a él, pues que se exponga en rueda de prensa y responda a todos los medios... no solo a El País, la Ser, RTVE...

El uso del género epistolar por parte de Pedro Sánchez no es un hecho aislado, sino parte de una estrategia más amplia de evitar la confrontación directa con la prensa. En una democracia, los líderes deben estar dispuestos a someterse al escrutinio público y a responder a las preguntas de los periodistas. Este intercambio es esencial para la transparencia y la rendición de cuentas. El miedo a la prensa no solo perjudica a los políticos, sino también a la calidad de la democracia y al derecho de la ciudadanía a estar bien informada. Esperamos que en futuras comunicaciones, el presidente y otros líderes opten por una mayor apertura y disposición a responder las preguntas que la sociedad necesita que se respondan.

Rafael M. Martos

Editor de Noticias de Almería

Periodista. Autor de "No les va a gustar", "Palomares en los papeles secretos EEUU", "Bandera de la infamia", "Más allá del cementerio azul", "Covid19: Diario del confinamiento" y la novela "Todo por la patria"