Un reciente estudio elaborado por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie) ha revelado que las pérdidas económicas globales causadas por la dana que afectó a la provincia de Valencia el 29 de octubre del año pasado superan los 17.000 millones de euros. Este dato, presentado este viernes, refleja el impacto devastador que tuvo este fenómeno meteorológico en activos tanto privados como públicos de la región.
El informe del Ivie, realizado por los expertos Francisco Pérez y Joaquín Maudos, detalla que estos daños afectaron al menos el 20% de los activos en las áreas impactadas, abarcando desde viviendas y comercios hasta infraestructuras esenciales y bienes agrícolas. La zona afectada incluye a 89 municipios, excluyendo la ciudad de Valencia, donde se concentran alrededor de un millón de habitantes y más de 60.000 empresas, representando el 35% de los activos totales de la provincia y un significativo 30% del empleo y valor añadido de la región valenciana.
Las estimaciones indican que solo en activos empresariales las pérdidas ascienden a más de 13.000 millones de euros. Este impacto ha puesto en jaque a sectores críticos como la logística y la manufactura, debido a interrupciones en el suministro energético, daños a redes de transporte y pérdidas de inventarios. Francisco Pérez ha subrayado que estos daños no se reflejan adecuadamente en la caída del PIB, ya que esta métrica no captura la destrucción de riqueza que implica la pérdida de activos físicos.
Reconstrucción y Ayudas
Ante la magnitud de la catástrofe, se ha hecho evidente la necesidad de una intervención significativa del Gobierno central, dado que ni el sector privado ni la Generalitat Valenciana disponen de los recursos necesarios para afrontar la recuperación. Joaquín Maudos ha insistido en la urgencia de invertir en infraestructuras hidráulicas, señalando que los recortes presupuestarios en los últimos años han dejado a la región vulnerable a eventos meteorológicos extremos.
El Ivie ha recomendado la utilización de herramientas de análisis georreferencial para mejorar el diagnóstico y la asignación de recursos en la fase de reconstrucción. Además, se ha destacado la importancia de una respuesta ágil y proporcional con ayudas directas para acelerar la recuperación en las zonas más afectadas.
Contexto y Opinión Pública
Las reacciones en las redes sociales y por parte de la ciudadanía han reflejado preocupación y urgencia por la reconstrucción. La cifra de 17.000 millones en pérdidas ha sido repetida en varios posts en X, donde usuarios expresan la necesidad de ayudas más sustanciales y una mejor gestión de los recursos asignados para la recuperación. Algunos incluso critican que las estimaciones iniciales podrían haber subestimado el impacto real para justificar ayudas menores.
La comunidad valenciana, especialmente aquellos en la denominada "zona cero", espera que estas cifras impulsen políticas de prevención y recuperación más robustas, asegurando que eventos similares no tengan tan graves consecuencias en el futuro.
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