El Juez José Luis Calama, de la Audiencia Nacional, ha decretado la prisión incondicional para dos ciudadanos marroquíes detenidos la semana pasada en El Ejido, Almería, por sospechas de integración en un grupo terrorista y de terrorismo. Esta decisión se ha tomado tras los indicios racionales encontrados durante la investigación, que apuntan a una afinidad ideológica con DAESH y a una progresiva radicalización, así como a la realización del juramento a Estado Islámico (DAESH) y a la intención de trasladarse a una zona de conflicto. Uno de los detenidos ha reconocido haber realizado el juramento y haber comunicado su intención de trasladarse al Sahel.
Basándose en las intervenciones telefónicas de los dos detenidos, las publicaciones de sus redes sociales y el contenido de los dispositivos de almacenamiento masivo, el magistrado concluyó que estaban radicalizados y planeaban viajar a un país extranjero para colaborar con una organización terrorista. El juez determinó que los detenidos habían estado activamente almacenando, distribuyendo y promoviendo contenido de carácter ideológico, doctrinal y de adiestramiento terrorista en línea, con la intención de reclutar seguidores de la Yihad. Por estas razones, se les impuso una medida de prisión que podría durar más de 10 años, debido a la gravedad de sus delitos, el riesgo de que pudieran cometer nuevos crímenes, su escasa conexión con España y el peligro de que pudieran huir. De hecho, uno de los detenidos había comenzado los preparativos para salir del país cuando fue arrestado.
El pasado miércoles, una operación antiterrorista llevada a cabo por las policías de Marruecos y España permitió la detención de tres presuntos yihadistas en la provincia de Almería y en la localidad marroquí de Chtouka Ait Baha. Según informó la Oficina Central de Investigación Judicial (BCIJ) marroquí, los detenidos mostraron su voluntad de involucrarse en operaciones terroristas, mantenían vínculos con combatientes dedicados al reclutamiento de adeptos para DAESH (Estado Islámico) en la región del Sahel, y contaban con manuscritos alabando a esta organización, así como con equipos y medios digitales y un pasamontañas. El detenido en Marruecos está bajo custodia policial, mientras que las autoridades españolas se encargan de los dos arrestados en Almería.