Los municipios de Roquetas de Mar y Vícar, en la provincia de Almería, han recuperado la normalidad en el abastecimiento de agua para uso doméstico y agrícola tras la reparación de una avería grave en la desaladora del Campo de Dalías.
La avería se produjo el pasado jueves en el centro de transformación de la planta desaladora, que gestiona la empresa pública Acuamed, dependiente del Ministerio de Hacienda. El fallo provocó una parada de toda la instalación y afectó al suministro de agua a más de 100.000 habitantes y a miles de hectáreas de cultivos bajo plástico.
Los ayuntamientos de las localidades afectadas activaron suministros alternativos y restringieron los usos no esenciales municipales para minimizar las posibles bajadas de presión o interrupción del servicio. Además, pidieron a la población que hiciera un uso responsable y optimizado del agua hasta la reanudación del suministro.
Según informaron fuentes municipales, la avería fue reparada por Acuamed el viernes por la noche y el servicio se restableció por completo el sábado por la mañana.
La desaladora del Campo de Dalías, ubicada en Balerma, tiene una capacidad de tratamiento de hasta 97.200 metros cúbicos diarios y es una infraestructura clave para garantizar el abastecimiento hídrico en el Poniente almeriense, una zona con escasez de recursos hídricos y una gran actividad agrícola.