La Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales en Almería ha organizado las Jornadas Formativas de Promoción de Hábitos de Vida Saludables, orientadas a profesionales de diferentes ámbitos que trabajan en contacto con menores, para que integren en su actividad habitual la difusión de los beneficios de una alimentación equilibrada, acompañada de la práctica regular de actividad física y el abandono de hábitos como el tabaquismo o el consumo de alcohol.
Las jornadas incluyen tres sesiones formativas, los días 5, 13 y 21 de junio, en las que participarán en total 90 personas. Entre los asistentes se incluyen profesionales sanitarios encargados del desarrollo del programa Forma Joven, personal de los centros de protección de menores y de los centros de Justicia Juvenil, trabajadores de ONG y entidades que llevan a cabo programas de atención a la infancia y juventud y personas que desarrollan su labor en otros ámbitos, como el educativo, en los que están en contacto directo con niños, niñas y adolescentes.
Las jornadas han sido inauguradas esta mañana por el delegado territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, José María Martín, quien ha señalado que “esta formación viene a reforzar las líneas de trabajo impulsadas en la provincia por la Consejería de Salud, a través de iniciativas como el Programa Forma Joven o la reciente Semana de Promoción de Hábitos de Vida Saludables, que se ha desarrollado con gran éxito en los últimos días por toda la provincia”.
Martín ha explicado que “a través de estas jornadas se pretende ofrecer una formación lo más amplia posible a quienes trabajan en la atención a la infancia y la adolescencia, para que incluyan entre su práctica diaria la apuesta por unos hábitos saludables”. El delegado ha subrayado que “las etapas infantil y juvenil son idóneas para la formación en valores y para fijar hábitos que después nos acompañarán durante toda la vida, contribuyendo con ello a la prevención de numerosas patologías y que los adultos del futuro gocen de mejor salud”.
En la sesión formativa celebrada hoy se han analizado aspectos como la promoción de la salud emocional entre jóvenes tutelados y ex tutelados, las buenas prácticas en el trabajo con menores en situación de riesgo, o el desarrollo de la inteligencia emocional.
El próximo día 13 de junio, en la segunda sesión, se abordarán la importancia de la actividad física en la infancia y adolescencia, así como de una buena higiene del sueño, las claves para una alimentación saludable, el cuidado de la salud bucodental, la relación entre la autoimagen y la salud o la higiene postural, para prevenir lesiones en la espalda en el entorno educativo.
En la tercera y última sesión de las jornadas, el 21 de junio, el programa incluye el estudio del programa Forma Joven, el abordaje de la sexualidad en la adolescencia, el fomento de las relaciones igualitarias y la lucha contra la violencia de género y el uso de métodos anticonceptivos y medidas para evitar el contagio de enfermedades de transmisión sexual.
Forma Joven
El programa Forma Joven tiene como objetivo promover entornos y conductas saludables entre los jóvenes. Es una iniciativa conjunta de las Consejerías de Salud, Educación, Igualdad y Políticas Sociales y Justicia e Interior, en colaboración con la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), las Asociaciones de Padres y Madres de Andalucía (AMPAs) y el Consejo de la Juventud de Andalucía.
Se trata, de una estrategia intersectorial ante los problemas de salud de los adolescentes y en los que se tratan temas de promoción de la salud que pretende acercar información y formación en salud a los espacios frecuentados por los adolescentes y jóvenes. Es por ello Salud y Educación desarrollan esta labor en colaboración estrecha, fundamentalmente, en los centros escolares en forma de asesorías o talleres, impartidos por profesionales sanitarios, de educación u otros, junto a alumnos específicamente formados para ello, que reciben el nombre de mediadores.
Forma Joven pretende capacitar a los jóvenes para que adopten las opciones más saludables en cuanto a los estilos de vida (alimentación, actividad física, sexualidad…) y en cuanto al bienestar psicológico y social, así como en la prevención de la accidentabilidad, el tabaquismo y otras adicciones. Se trata de ofrecer instrumentos y recursos para que puedan afrontar los riesgos más comunes y frecuentes en estas edades.
Ley para la Promoción de una Vida Saludable y una Alimentación Equilibrada
El Gobierno andaluz ha desarrollado diferentes programas para promover estilos de vida sanos entre la población, como claves en la promoción de la salud y la prevención de enfermedades. Ahora, va más allá con la apuesta por la futura Ley para la Promoción de una Vida Saludable y una Alimentación Equilibrada, que establecerá las bases de las políticas contra la obesidad en Andalucía y que se encuentra actualmente en tramitación parlamentaria.
Es la primera vez que una comunidad autónoma regula con el máximo rango normativo la lucha contra la obesidad y los trastornos de la conducta alimentaria en general, con especial atención a la infancia como colectivo prioritario, además de las mujeres embarazadas, las personas mayores y los grupos de población socialmente más desfavorecidos.
El proyecto sigue las recomendaciones de organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud en el sentido de implicar a la sociedad en su conjunto, sobre todo administraciones públicas, sectores empresariales, medios de comunicación y empresas de publicidad. En su elaboración han participado alrededor de 250 personas de diferentes colectivos, entre los que destacan asociaciones de pacientes, consumidores y padres y madres de centros educativos; miembros de sociedades científicas y colegios profesionales; medios de comunicación, y empresarios de los sectores afectados.
La futura ley establecerá el derecho de la población andaluza a la información, el conocimiento, la promoción, la prevención y la participación en las iniciativas de salud pública vinculadas con la alimentación equilibrada, la actividad física y el entorno físico y psicosocial saludable.
Para hacer efectivo este derecho, se establecen medidas como la exigencia de disponer de menús saludables y de diferentes tamaños de raciones en los establecimientos de restauración; tener alternativas de adquisición de alimentos frescos y perecederos en cantidades adaptadas a la composición de las unidades familiares; y habilitar aparcamientos de bicicletas en los lugares de trabajo con más de 50 empleados.
Una medida clave de la futura norma andaluza será la de favorecer el acceso gratuito al agua potable en los centros educativos, lugares públicos y centros de ocio infantil, promoviendo la dotación de fuentes en estos espacios. Además, se exigirá a las empresas de máquinas expendedoras de productos alimentarios que ofrezcan agua gratuita en aquellos centros docentes en los que se permite su instalación y en los lugares de ocio infantil, ya sea integrada en sus propios dispositivos o a una distancia de hasta dos metros de los mismos.
En la misma línea, los bares y restaurantes deberán ofrecer a los clientes un recipiente con agua y vasos, de forma gratuita y complementaria a la oferta del establecimiento.
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