¿Por qué una bacteria se considera vida en el planeta Marte, cuando un latido prenatal no se considera vida en la Tierra?
Lo de Europa no tiene nombre. Nos acabamos de enterar que este próximo 11 de abril el Parlamento Europeo va a votar reformar la Carta de Derechos Fundamentales ¡para incluir el aborto! Quieren convertir el asesinato es un derecho fundamental europeo.
Francia abrió la veda al convertir el aborto en un derecho fundamental hace un mes. Ahora, los proabortistas europeos quieren aprovechar el tirón del éxito que han tenido en el país galo y hacer lo mismo en toda Europa.
Quieren poner al mismo nivel la libertad de expresión o la propiedad privada con terminar con la vida de tu propio hijo, con nuestros hijos. Estamos alcanzando unos niveles de locura inimaginables. Cuando el Estado no pone su poder al servicio de los derechos de toda categoría de seres humanos, y particularmente de la que es más débil, niega la igualdad de todos ante la ley y se quebrantan los fundamentos mismos del Estado de Derecho.
Aquí en España es Yolanda Díaz quien intenta promover esta iniciativa para que el Congreso incluya el aborto en la Constitución. Por suerte, ya nadie hace caso a Yolanda y por ahora no han recogido su propuesta, pero si Europa sacase adelante esta iniciativa sin duda alguna el Gobierno de Sánchez iría detrás.
Los movimientos provida tienen que reaccionar y parar al aborto tanto en Europa como en España ahora. España es un ejemplo clarísimo de sociedad mal adaptada, en colapso demográfico y cultural y en proceso de desaparición.
Inducir a la muerte de un bebé, si un bebé, no puede convertirse en un derecho. Está más que demostrado, no se trata de religión, ni de política, que el feto, para mí, con ternura un bebé en el vientre materno, es una vida humana distinta de la vida humana de la madre. Es un ser con un código genético distinto, que a los 18 días de su gestación comienza a latir el corazón en un cuerpecito pequeñito de niño o niña inocente, agravado por el vínculo y la desproporción de las fuerzas, es un ser indefenso, que tiene derecho a la vida, no a la muerte.
Sí hubiesen decidido por cualquier casuística, que nuestras madres hubieran interrumpido el embarazo, con la aquiescencia de las autoridades que autorizan este suicidio no deseado, involuntario, no conforme al Derecho Natural, no estaríamos vía telemática leyendo lo aquí testimoniado. Paz y Bien.