Se trata de una iniciativa conjunta de Diputación, Cámara de Comercio y el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo que tiene el objetivo de fijar la población mejorando la competitividad y la incursión del comercio en el mundo 2.0
Dicha actividad causó gran alarma entre los vecinos, agravándose los fines de semana cuando aumentaba el número de personas que acudían al punto de venta.