Toda la oposición dice no a los presupuestos del PP para la capital

En una sesión extraordinaria marcada por la intensidad de los debates, el Pleno del Ayuntamiento de Almería aprobó los presupuestos para el año 2024, alcanzando una cifra récord de 267 millones de euros. La aprobación de este presupuesto, el más alto en la historia de la ciudad, fue posible gracias a la mayoría absoluta del Partido Popular (PP).

La alcaldesa, María del Mar Vázquez, en su intervención, resaltó que se trata de un presupuesto "muy social y orientado hacia la inversión". Entre los proyectos destacados se encuentran el soterramiento, la transformación del casco histórico y la renovación del paseo de Almería. Estas iniciativas, según el alcalde, contribuirán al desarrollo y mejora de la ciudad, generando un impacto positivo en la calidad de vida de los ciudadanos.

Sin embargo, la aprobación del presupuesto no estuvo exenta de polémica. La subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) generó un fuerte rechazo por parte de la oposición. La medida, que supondrá un aumento medio de 72 euros por vivienda, fue criticada por representantes de distintos partidos políticos.

Adriana Valverde, portavoz del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), expresó su desacuerdo, calificando el presupuesto como "el presupuesto del sablazo". Según Valverde, la subida del IBI, superior al 13%, impactará negativamente en los bolsillos de los ciudadanos.

Juan Francisco Rojas, portavoz de Vox, manifestó su preocupación por el aumento del gasto y cuestionó la moralidad de alardear sobre el presupuesto más alto de la historia, basado principalmente en una subida de impuestos. Para Rojas, esto representa una indecencia moral.

Por su parte, el concejal de Podemos, Alejandro Lorenzo, consideró que los presupuestos son "continuistas a la baja" y los calificó como "tremendamente negativos para la ciudad", anunciando el voto en contra de su formación.

La aprobación de estos presupuestos cierra el año político en Almería con dos plenos extraordinarios que han dejado entrever las tensiones y divergencias ideológicas en el ámbito municipal. El debate sobre la orientación de las finanzas municipales y la carga impositiva seguirá siendo un tema central en las discusiones políticas locales en los próximos meses.