La manera más sencilla para que algo deje de existir, es borrarle el nombre, y eso se ha hecho en el Barómetro de Opinión Pública de Andalucía, dependiente de la Consejería de Presidencia, respecto a la identidad andaluza, a pesar de que el trabajo se realiza desde la Fundación Pública Andaluza Centro de Estudios Andaluces.
Esta encuesta es heredera de la EGOPA, que venía desarrollándose desde la Universidad de Granada, pero desde que la ha asumido el Centro de Estudios Andaluces han desaparecido preguntas que antes se venía realizando sobre el sentimiento nacionalista, sobre en qué grado nos sentimos más o menos (o igual) andaluces que españoles, o sobre qué nivel de andalucismo percibimos en las distintas formaciones políticas. Sobre todo eso ha dejado de preguntarse, y por tanto, es un argumento del que tampoco se habla ni en las informaciones, ni las opiniones sobre este trabajo. La idea parece ser que, si no se menciona la expresión “nacionalismo andaluz”, éste deja de existir, y si se deja de preguntar a quién quieres más, si a papá o mamá, resultará que querrás a los dos igual.
Es curioso que ni tan siquiera se mencione el “andalucismo”, cuando el PP de Juanma Moreno dice abanderar el “nuevo andalucismo”, y hasta el irreductible Javier Arenas ubicó a su partido en el “andalucismo democrático” coincidiendo con los años que logró una mayor base electoral, hasta el punto de ganar al PSOE.
Es curioso que se rindan honores al Padre de la Patria Andaluza, Blas Infante, pero cuando se menciona la palabra “patriota” en la encuesta, se asocia directamente a “español”, y se coloca la expresión “español/patriota” en el listado de conceptos políticos tales como el feminismo, el ecologismo, el nacionalismo, el liberalismo, el conservadurismo, la socialdemocracia, el socialismo… es decir, ser español es, en si mismo, una ideología, según los sociólogos que han realizado la encuesta.
En la EGOPA de 2018, de la que este barómetro es heredero, en la pregunta sobre el sentimiento nacionalista andaluz, siendo 0 igual a ningún sentimiento nacionalista, y el 10 el máximo, es cierto que los dos extremos están próximos, aunque el andalucismo gana por un punto, pero si cogemos del cinco para delante en un caso, y del cinco para atrás en el otro, se observa que 27,9% está más próximo al no nacionalismo, en tanto que el 52,4% está en el entorno nacionalista.
Ahora, a lo más que llega la nueva encuesta es a listar una serie de palabras con las que autodefinirse, como ya hemos indicado, en la que mientras se aúnan “español/patriota”, no aparece por ningún sitio ni “andaluz” ni “andalucista”, aunque eso tampoco oculta una realidad, y es que “español/patriota” es la opción del 0,1% de los encuestados, mientras que los nacionalistas suponen el 2,3%, que por cierto, superan al 2,1% que se definen comunistas, y que unido al 0,5% de independentistas ya son el 2,7%.
Esta autoubicación obliga a que no puedas definirte como liberal y andalucista a un tiempo, o conservador y patriota español a la vez, o socialista y patriota español, o conservador y liberal, o ser socialista y republicano, o independentista y socialista y republicano, o comunista y nacionalista, o comunista y patriota español… un desastre!!!
Pero este penoso trabajo que pagamos entre todos, hace aguas por más vías, ya que pregunta por partidos políticos que no están en el Parlamento Andaluz, que incluso no se han presentado a elecciones andaluzas, que no tienen representación alguna en ninguna institución andaluza o por Andalucía, como Más País o Pacma, mientras que, por ejemplo pregunta por Podemos, que está integrado en Adelante Andalucía, por la que también pregunta, pero no lo hace por Primavera Andaluza que está en la misma situación pero además tiene una senadora, o por Izquierda Andaluza… Y puestos así ¿por qué no se pregunta por Falange Española, a la que se ha adherido la parlamentaria no adscrita que se marchó de Vox?
Es como no hacer una encuesta sobre la monarquía… no vaya a salir que queremos una república.
NOTA: Los datos aquí recogidos están tomados de las EGOPA de 2018 y del apartado de "tablas de frecuencia" del Barómetro de junio de 2019.