Al final no ha habido lista de consenso en la agrupación socialista de la capital, y la militancia tendrá que escoger entre Adriana Valverde y Carmen Aguilar como cabeza de lista en las próximas elecciones municipales de mayo de 2023, y la pregunta es ¿qué fue de Noemí Cruz?
En realidad, esta pregunta trasciende a la propia exparlamentaria, porque ella venía a representar el ala no “sanchista” del PSOE, lo que venía siendo el “susanismo”, pero que desde que no está Susana Díaz, solo se sabe que son “los otros”.
Valverde es del sector “sanchista”, como la Ejecutiva municipal, y por tanto se entiende que como la mayoría de la agrupación, por lo que se apunta como más que previsible ganadora de las Primerias, pero que como hemos indicado, aquí se está jugando otra partida que trasciende los comicios locales, y es si la agrupación municipal sigue resistiendo frente a la Ejecutiva provincial o es finalmente ésta la que acaba imponiéndose.
No es fácil, porque basta recordar las afiliaciones masivas y por sorpresa que se producen en esta agrupación cada vez que hay que elegir candidatos… sí, luego lo validará el PSOE Federal, el de Pedro Sánchez, pero no olvidemos es quien pone como Fiscal General del Estado a una exministra, y como miembro del Tribunal Constitucional a otro exministro, por lo que refleja como entiende la aplicación de las normas… incluso de las propias.
Es evidente que Fernando Martínez e Indalecio Gutiérrez no van a permitir que gane las Primarias Carmen Aguilar, porque eso les debilitaría a ellos mismos, y sobre todo, sería un revés monumental para quien forma parte del Gobierno de Sánchez como Secretario de Estado.
La cuestión es qué pasará con Noemí Cruz, a quien todos situábamos como contrincante de Adriana Valverde, tras quedarse fuera del Parlamento de Andalucía, cuya lista fue un pacto entre los dos sectores socialistas, y en la que Juan Espadas impuso a Pilar Navarro, lo que al ser cremallera, la coloco en cuarto lugar, y a la postre, sin escaño.
La respuesta a por qué Noemí Cruz no ha dado el paso de liderar la alternativa a Valverde deja claro que no tenía nada claro poder ganarle, e incluso que carecía de fuerza suficiente como obtener una posición relevante en un posible pacto.
Carmen Aguilar cuenta a su favor con varias cosas, entre ellas es que le arrebata a Valverde su principal argumento, y es el conocimiento de la ciudad y del Ayuntamiento, ya que ambas pueden presumir de lo mismo, así habrá que estar atentos a qué ofrece cada una a la militancia.
En todo caso, la militancia del PSOE es consciente de todo esto que venimos contando, y por tanto, el resultado de sus Primarias puede entenderse como un plebiscito a la Ejecutiva municipal, que es tanto como al propio “sanchismo”, y es que partimos de que ambas candidatas son copartícipes de la gestión del grupo municipal en lo bueno y el malo, por lo que hay en juego otras cuestiones.
Y la pregunta sigue siendo la del principio ¿y Noemí Cruz? Es tarde y se haría raro, verla en la lista de Valverde, pero también en la de Aguilar, a no ser que la jugada sea más amplia y se piense en ella para presidir la Diputación en caso de ganarla el PSOE.